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Aparcamiento en el embalse.
Iglesia de Goroeta.
Empezamos con las puertas.
Según subimos comenzamos a ver un bonito panorama sobre el embalse de Urkulu.
La primera borda.
En este punto dejamos el camino y comenzamos a subir por ladera herbosa.
Traspasamos el arbolado al final de la ladera.
Seguimos subiendo por el contrafuerte NE de Kurutzeberri.
La niebla nos impide ver más allá que dos o tres metros.
Y además está lloviendo.
Está pequeña víbora está tan sorprendida y tiene tanto frío o más que nosotros.
Comienzan las rocas próximas a la cima.
Kurutzeberri.
Pretendemos salir de la cima de la mejor manera posible.
Apotza.
Abajo el collado de Apotza.
Durante unos segundos se abre una pequeña ventana y podemos contemplar la cima de Elorreta.
Ya dentro del bosque seguimos por la PR-GI-3002.
Una sima.
Una borda entre las rocas.
Un bonito paso entre las rocas.
Ante nuestra vista aparecen las bonitas majadas de Degurixa.
Nos desviamos a la izquierda por amplia pista.
Otro desvío a la izquierda.
Seguimos las marcas de PR.
Urkulu "erreka".
Cruzamos el arroyo.
Un salto de alambrada.
Otro salto más.
Llegamos a la cola del embalse.
Volviendo al lado del embalse vemos, nuevamente, la iglesia de Goroeta.
Por ahí arriba hemos estado.
La intención, en principio, era disfrutar de una bonita zona
y subir a unas cuantas cimas para posteriormente descansar un rato a la orilla
del embalse de Urkulu.
Nos ha salido todo bastante torcido.
Hemos llegado al embalse y estaba el cielo muy encapotado.
Según subíamos hacia Kurutzeberri ha empezado a llover y además de mojarnos el terreno se ha puesto muy resbaladizo y la zona de rocas estaba prácticamente impracticable.
Las rocas resbalaban mucho y era necesario prestar mucha atención para evitar una buena caída.
Para culminar nuestras penas, ya próximos a la cumbre de Kurutzeberri, la visibilidad era de unos dos metros.
En fin, un auténtico día "gafado".
En vista de lo anterior, hemos tenido que recortar la vuelta ya que era imposible poder disfrutar de las vistas y además el andar por rocas era muy arriesgado.
Hemos aparcado el vehículo al lado de una caseta con baños públicos y próximo a una zona de mesas de pic-nic y fuente.
Una vez dispuestos nos ponemos en marcha en dirección a la iglesia de Goroeta y aquí comenzamos el ascenso por una pista cementada que también pasa al lado del caserío Errekabitarte.
Seguimos subiendo por una cómoda pista y a medida que ascendemos contemplamos las vistas sobre el embalse y el resto de la zona.
Seguimos ascendiendo por buen camino y además en zig-zag hasta que unos 45 minutos después de iniciado el ascenso dejamos el camino y nos desviamos a la derecha por la ladera herbosa, justo en el momento que alcanzamos la parte cimera del contrafuerte de Kurutzeberri.
Seguimos por la ladera herbosa, sin sendero definido y un poco más arriba enlazamos con un pequeño sendero que llega desde nuestra derecha.
Tomamos el mismo y continuamos subiendo y poco a poco comenzamos a notar la escasa visibilidad.
Nos damos cuenta que debemos estar cerca de la cima ya que vemos grandes formaciones rocosas.
Avanzamos guiándonos por la dirección de la cima e intentando buscar el camino menos difícil para evitar las rocas, dentro de lo posible, ya que con la lluvia están muy resbaladizas.
Al final y cuando estamos a unos dos metros de la cima, vemos la gran cruz metálica de Kurutzeberri.
Nos paramos unos pocos minutos para sacar algunas fotos y girando desde la cima unos 180º intentamos retornar al camino, con el menor perjuicio posible.
Salimos a una zona más pisable e intentamos retomar la dirección hacia el collado de Apotza.
Para entonces ya habíamos tomado la decisión de evitar las cimas de Elorreta, Aranguren, Arluz, Maruatx, Andarto, etc., que eran nuestro primitivo objetivo.
Poco a poco y como buenamente podemos, conseguimos pasar Elorreta sin subir a su cima, aunque ni siquiera la hemos visto.
No conseguimos ver nada más allá de 2 ó 3 metros y tenemos grandes dificultades para intentar encontrar el sendero menos malo que nos conduzca hacia Apotza.
Al final conseguimos llegar a la cima de Apotza y poco después bajamos hasta el collado del mismo nombre.
En este collado enlazamos con la PR-GI-3002 "Vuelta a Kurutzeberri" que en este sentido llega hasta Aretxabaleta.
En vista de la lluvia, la niebla, el tiempo que hemos perdido buscando la salida desde Kurutzeberri, etc., decidimos seguir la PR para poder llegar al punto de inicio.
Seguimos la PR y vemos como dejamos a nuestra derecha la cima de Aranguren y poco después comenzamos a bajar hacia las majadas de Degurixa.
Desde la parte alta parece un pequeño y precioso valle, con sus bordas de pastores y su entorno verde.
Es un magnífico lugar y un gran descubrimiento.
Cruzamos prácticamente todas las majadas y al lado de un poste indicador de caminos, nos desviamos a la izquierda, en ascenso, para seguir nuestra PR.
Continuamos avanzando y poco a poco nos adentramos en el barranco por el cual discurre la regata de Urkulu.
El camino no es muy ancho y ni siquiera bueno, ya que debido a la lluvia está un poco resbaladizo y también nos obliga a ralentizar el paso.
Poco a poco conseguimos llegar a la cola del embalse y a la carretera que lo bordea y ya desde aquí y siguiendo el borde del embalse, conseguimos llegar al punto de inicio.
Una vez en el aparcamiento nos hemos quitado las botas para estar más cómodos y después de refrescarnos un poco hemos ido a sentarnos a unas mesas próximas al aparcamiento, en donde hemos podido comer algo de nuestra provisiones.
Un poco más descansados nos sentamos en una mesa y al lado de una fuente para comenzar a degustar aquellas viandas que, en previsión, habíamos traído.
Para que no faltase de nada, en el momento que empezábamos a comer sale un sol de justicia y como en la zona de las mesas de pic-nic no había nada de sombra, hemos tenido que terminar la comida con gafas de sol.
Así y todo hemos aprovechado el momento para degustar lo siguiente:
-Un poco de pescado conservado en aceites esenciales que ha resultado estar excelente.
-Hemos seguido con unos bivalvos con denominación de origen Galizia que se encontraban macerados durante varios meses en diversas esencias, ácidos acéticos, especias varias, etc. Magníficos.
-Seguimos con pernil de ibérico asado al horno de leña para continuar con una cecina de vaca perfectamente curada y debidamente aceitada.
-Un pequeño detalle con unas pocas lonchas de un jamón ibérico de bellota.
-Para terminar unos trozos de "fromage" en su punto de curación y con una buena denominación de origen.
Esta "delicatessen" la hemos maridado con el estrujamiento del "xato" habitual que en su interior guardaba la mezcla de varios caldos, pero todos ellos con denominación de origen Rioja.
Para el toque final, hemos tomado un poco de café caliente traído expresamente de la magnífica zona de Bidebieta.
Ligera y corta sobremesa con objeto de evitar el sol que nos ha faltado durante toda la mañana y nos ponemos en marcha para volver a nuestros respectivos domicilios.
Hemos comenzado a andar sobre las 8 horas y 21 minutos y acabado en el mismo sitio sobre las 15 horas y 25 minutos.
El tiempo efectivo empleado en el recorrido ha sido de 5 horas y 26 minutos a una media de 2,7 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos (pocas), agua, descansos, "hamaiketako", etc., ha sido de 1 hora y 36 minutos.
El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 837 metros.
La longitud total del recorrido realizado ha sido de unos 14,3 kms.
El problema de este recorrido ha sido la niebla y la lluvia que han hecho muy dificultoso el avance y que además hayamos tenido que desistir de subir a varias cimas.
La parte un poco complicada siempre será la zona de las cimas, debido a la cantidad de rocas del entorno.
Si es como en nuestro caso, la falta de visibilidad impide realizar una aproximación buena ya que aunque utilices GPS con un "track", no es suficiente para intentar encontrar el sendero menos malo, únicamente puedes orientarte para no perder la dirección hacia tu destino, pero poco más.
Nosotros y teniendo en cuenta las dificultades climatológicas, vamos a calificar esta ruta como Moderada.
Para llegar al embalse de Urkulu es preciso llegar a la población de Aretxabaleta y desde allí tomar la GI-3131 que te llevará directamente al embalse.
Nos ha salido todo bastante torcido.
Hemos llegado al embalse y estaba el cielo muy encapotado.
Según subíamos hacia Kurutzeberri ha empezado a llover y además de mojarnos el terreno se ha puesto muy resbaladizo y la zona de rocas estaba prácticamente impracticable.
Las rocas resbalaban mucho y era necesario prestar mucha atención para evitar una buena caída.
Para culminar nuestras penas, ya próximos a la cumbre de Kurutzeberri, la visibilidad era de unos dos metros.
En fin, un auténtico día "gafado".
En vista de lo anterior, hemos tenido que recortar la vuelta ya que era imposible poder disfrutar de las vistas y además el andar por rocas era muy arriesgado.
Hemos aparcado el vehículo al lado de una caseta con baños públicos y próximo a una zona de mesas de pic-nic y fuente.
Una vez dispuestos nos ponemos en marcha en dirección a la iglesia de Goroeta y aquí comenzamos el ascenso por una pista cementada que también pasa al lado del caserío Errekabitarte.
Seguimos subiendo por una cómoda pista y a medida que ascendemos contemplamos las vistas sobre el embalse y el resto de la zona.
Seguimos ascendiendo por buen camino y además en zig-zag hasta que unos 45 minutos después de iniciado el ascenso dejamos el camino y nos desviamos a la derecha por la ladera herbosa, justo en el momento que alcanzamos la parte cimera del contrafuerte de Kurutzeberri.
Seguimos por la ladera herbosa, sin sendero definido y un poco más arriba enlazamos con un pequeño sendero que llega desde nuestra derecha.
Tomamos el mismo y continuamos subiendo y poco a poco comenzamos a notar la escasa visibilidad.
Nos damos cuenta que debemos estar cerca de la cima ya que vemos grandes formaciones rocosas.
Avanzamos guiándonos por la dirección de la cima e intentando buscar el camino menos difícil para evitar las rocas, dentro de lo posible, ya que con la lluvia están muy resbaladizas.
Al final y cuando estamos a unos dos metros de la cima, vemos la gran cruz metálica de Kurutzeberri.
Nos paramos unos pocos minutos para sacar algunas fotos y girando desde la cima unos 180º intentamos retornar al camino, con el menor perjuicio posible.
Salimos a una zona más pisable e intentamos retomar la dirección hacia el collado de Apotza.
Para entonces ya habíamos tomado la decisión de evitar las cimas de Elorreta, Aranguren, Arluz, Maruatx, Andarto, etc., que eran nuestro primitivo objetivo.
Poco a poco y como buenamente podemos, conseguimos pasar Elorreta sin subir a su cima, aunque ni siquiera la hemos visto.
No conseguimos ver nada más allá de 2 ó 3 metros y tenemos grandes dificultades para intentar encontrar el sendero menos malo que nos conduzca hacia Apotza.
Al final conseguimos llegar a la cima de Apotza y poco después bajamos hasta el collado del mismo nombre.
En este collado enlazamos con la PR-GI-3002 "Vuelta a Kurutzeberri" que en este sentido llega hasta Aretxabaleta.
En vista de la lluvia, la niebla, el tiempo que hemos perdido buscando la salida desde Kurutzeberri, etc., decidimos seguir la PR para poder llegar al punto de inicio.
Seguimos la PR y vemos como dejamos a nuestra derecha la cima de Aranguren y poco después comenzamos a bajar hacia las majadas de Degurixa.
Desde la parte alta parece un pequeño y precioso valle, con sus bordas de pastores y su entorno verde.
Es un magnífico lugar y un gran descubrimiento.
Cruzamos prácticamente todas las majadas y al lado de un poste indicador de caminos, nos desviamos a la izquierda, en ascenso, para seguir nuestra PR.
Continuamos avanzando y poco a poco nos adentramos en el barranco por el cual discurre la regata de Urkulu.
El camino no es muy ancho y ni siquiera bueno, ya que debido a la lluvia está un poco resbaladizo y también nos obliga a ralentizar el paso.
Poco a poco conseguimos llegar a la cola del embalse y a la carretera que lo bordea y ya desde aquí y siguiendo el borde del embalse, conseguimos llegar al punto de inicio.
Una vez en el aparcamiento nos hemos quitado las botas para estar más cómodos y después de refrescarnos un poco hemos ido a sentarnos a unas mesas próximas al aparcamiento, en donde hemos podido comer algo de nuestra provisiones.
Un poco más descansados nos sentamos en una mesa y al lado de una fuente para comenzar a degustar aquellas viandas que, en previsión, habíamos traído.
Para que no faltase de nada, en el momento que empezábamos a comer sale un sol de justicia y como en la zona de las mesas de pic-nic no había nada de sombra, hemos tenido que terminar la comida con gafas de sol.
Así y todo hemos aprovechado el momento para degustar lo siguiente:
-Un poco de pescado conservado en aceites esenciales que ha resultado estar excelente.
-Hemos seguido con unos bivalvos con denominación de origen Galizia que se encontraban macerados durante varios meses en diversas esencias, ácidos acéticos, especias varias, etc. Magníficos.
-Seguimos con pernil de ibérico asado al horno de leña para continuar con una cecina de vaca perfectamente curada y debidamente aceitada.
-Un pequeño detalle con unas pocas lonchas de un jamón ibérico de bellota.
-Para terminar unos trozos de "fromage" en su punto de curación y con una buena denominación de origen.
Esta "delicatessen" la hemos maridado con el estrujamiento del "xato" habitual que en su interior guardaba la mezcla de varios caldos, pero todos ellos con denominación de origen Rioja.
Para el toque final, hemos tomado un poco de café caliente traído expresamente de la magnífica zona de Bidebieta.
Ligera y corta sobremesa con objeto de evitar el sol que nos ha faltado durante toda la mañana y nos ponemos en marcha para volver a nuestros respectivos domicilios.
Hemos comenzado a andar sobre las 8 horas y 21 minutos y acabado en el mismo sitio sobre las 15 horas y 25 minutos.
El tiempo efectivo empleado en el recorrido ha sido de 5 horas y 26 minutos a una media de 2,7 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos (pocas), agua, descansos, "hamaiketako", etc., ha sido de 1 hora y 36 minutos.
El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 837 metros.
La longitud total del recorrido realizado ha sido de unos 14,3 kms.
El problema de este recorrido ha sido la niebla y la lluvia que han hecho muy dificultoso el avance y que además hayamos tenido que desistir de subir a varias cimas.
La parte un poco complicada siempre será la zona de las cimas, debido a la cantidad de rocas del entorno.
Si es como en nuestro caso, la falta de visibilidad impide realizar una aproximación buena ya que aunque utilices GPS con un "track", no es suficiente para intentar encontrar el sendero menos malo, únicamente puedes orientarte para no perder la dirección hacia tu destino, pero poco más.
Nosotros y teniendo en cuenta las dificultades climatológicas, vamos a calificar esta ruta como Moderada.
Para llegar al embalse de Urkulu es preciso llegar a la población de Aretxabaleta y desde allí tomar la GI-3131 que te llevará directamente al embalse.
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