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En la estación de Usurbil.
Santuenea.
Ermita de San Esteban.
Zona de pic-nic bajando de la ermita.
Zona de Txoko alde y paso a nivel.
Puente sobre el Oria.
Recolección de guindillas.
Casa Mapill.
Túnel bajo la N-634.
Desvío a la izquierda.
Segundo desvío a la izquierda.
Zona de Mapillerreka.
Puerta metálica al lado de la empresa angulera.
En la zona del puente del barco.
Casa Arrate.
Túnel bajo la autopista.
Sidrería Urdaira.
Otra puerta.
Varios saltos de alambrada seguidos.
Sendero.
En Benta de Orio.
Dejamos la pista principal y nos desviamos a la derecha.
Antenas cercanas a Kukuarri.
Panorama desde Kukuarri.
Kukuarri.
Escultura de la Virgen de Kukuarri.
Bajando desde Kukuarri.
Desvío a la derecha.
Puesto de caza en la ladera de Kukuarri y Talaigaina.
Atravesamos el murete de piedras para girar a la izquierda.
Atravesamos esta "langa" para llegar a una pista.
Abandonamos la pista y giramos a la izquierda.
Abajo el camping de Orio.
Ermita de San Juan.
Así y todo hemos pasado por unos senderos que nos han resultado curiosos y novedosos.
Comenzamos nuestra travesía en la estación del tren de Usurbil, no sin problemas, ya que hemos tenido que hacer un trasbordo en Errekalde debido a una avería en el tendido eléctrico.
Afortunadamente no hemos perdido mucho tiempo.
En la estación de Errekalde hemos tenido que esperar a un autobús que hacía las veces del tren y por tanto nos ha dejado en la estación de Usurbil.
Si alguien tenía pensado llegar a Bilbao en el tren.................., que no le pase nada.
Una vez pertrechados nos ponemos en marcha cruzando las vías del tren y dirigiéndonos hacia el barrio de Santuenea.
Desde aquí comenzamos a subir hacia la ermita de San Esteban a través de una zona con escaleras y fuerte pendiente, que nos hace sudar las primeras gotas.
Desde la ermita comenzamos a descender a través de una bonita zona preparada con mesas y arbolado para llegar a la zona de Txokoalde, en donde volvemos a cruzar las vías del tren y también cruzamos el río Oria por un bonito puente.
Continuamos avanzando por terreno llano y paralelos al río y entre una zona de huertas muy amplia.
Vemos que están recogiendo guindillas verdes y a juzgar por el aspecto y el color de la piel, los recolectores no son precisamente los "baserritarras" de la zona.
Son trabajadores y hay muchos trabajando, lo que no sabemos es el tipo y/o la forma de remuneración, si en metálico, en especie, etc.
En principio nos parece muy bien que hayan contratado personal para realizar la recolección de las guindillas ya que hemos visto unos campos bastante extensos.
Continuamos avanzando y nos aproximamos a la carretera N-634 pero sin tocarla.
Pasamos al lado de la Casa Mapill y seguimos por detrás de la misma para atravesar la carretera por un pequeño túnel.
Continuamos avanzando paralelos a Mapillerreka y después de girar a la izquierda en un pabellón comenzamos a ascender y poco después volvemos a desviarnos a la izquierda.
Continuamos subiendo para llegar a una zona de una pequeña cascada y una bonita fuente (desgraciadamente sin agua), que corresponde con la parte más bonita de Mapillerreka.
Seguimos adelante y atravesamos una puerta metálica al lado de una empresa angulera y un poco más a la derecha podemos ver el famoso puente de mando de un pesquero.
Seguimos avanzando por cómoda pista y pasamos al lado de la Casa Arrate y atravesamos la autopista por un túnel.
Seguimos subiendo para llegar a la Sidrería Urdaira.
Bordeamos la sidrería girando hacia el Oeste y atravesamos otra puerta metálica más.
Continuamos subiendo por sendero estrecho y un poco cerrado y el camino nos obliga a saltar hasta cuatro veces la alambrada, antes de llegar a Bentas de Orio.
Una vez en Bentas de Orio vemos que la taberna está cerrada y aprovechamos unas mesas de piedra del exterior para sentarnos unos minutos y comer algo de fruta, frutos secos, etc.
Pero sobre todo bebemos unos buenos tragos de agua, ya que aunque la temperatura no es muy alta, el porcentaje de humedad es muy elevado y nos hace sudar abundantemente.
Volvemos a la pista principal y poco después nos desviamos a la derecha con intención de llegar, primero a las antenas y después a la cima de Kukuarri.
Vemos la cruz, las pinturas en las rocas, la escultura de la Virgen de Kukuarri, etc.
Hay un primer intento de acceder a la cima próxima de Talaigaina, pero viendo como está de cerrada la zona, con zarzas, rocas y demás, tomamos la mejor decisión posible:
Olvidarnos de Talaigaina.
Comenzamos a bajar por sendero estrecho y bastante inclinado, lo que nos hace prestar mucha atención a la bajada ya que hay zonas en las que resulta un tanto resbaladiza.
Nos desviamos a la derecha atravesando una alambrada y continuamos descendiendo entre bosque y a veces con bastante precaución.
Pasamos al lado de varios puestos de caza y poco después volvemos a desviarnos atravesando un pequeño murete de piedras.
Otra vez nos encontramos con un sendero estrecho y bastante resbaladizo pero que lo solventamos sin problemas.
Un poco más adelante se suaviza el descenso y llegamos a atravesar una "langa" un poco antes de llegar a una pista asfaltada.
Cincuenta metros después abandonamos la pista girando a la izquierda y nuevamente por sendero estrecho y en buena pendiente llegamos en diez minutos a la ermita de San Juan.
Desde la ermita únicamente nos quedan unos doscientos metros para llegar al casco urbano próximo al camping de Orio.
Decidimos dirigirnos al bar del camping para ver como está y si merece la pena quedamos a comer en el mismo.
Después de unas indagaciones preliminares, tomamos un ligero "aperitive" sentados a la sombra y minutos después recogemos los "petates" y nos dirigimos al centro del pueblo, a una zona próxima a la estación.
Un poco antes de llegar a la plaza principal nos quedamos en una taberna con unas mesas en el exterior y a la sombra y decidimos quedarnos a comer.
La verdad es que hemos comido bastante bien y muy a gusto.
A la sombra, con algo de brisa y con un servicio rápido y muy simpático.
De primeros nos han servido:
-Ensaladas mixtas y patatas a la riojana.
De segundos:
-Albóndigas en salsa y con patatas fritas, pollo asado con patatas fritas y una chuleta de cerdo, también con patatas fritas y además con dos pimientos del piquillo.
Las patatas fritas no era congeladas, lo que ya es mucho decir.
Postres diversos, es decir, tres han tomado un cucurucho de helado y el cuarto un plato de un magnífico queso.
Los correspondientes cafés, ligera sobremesa, risas para hacer la cuenta y nos ponemos en marcha hacia la estación.
Hemos comenzado a andar sobre las 8 horas y 20 minutos y acabado en el lugar de la comida sobre las 13 horas y 41 minutos.
El tiempo efectivo empleado en la travesía ha sido de 4 horas y 24 minutos a una media de 3,2 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos, descansos, "hamaiketako", "aperitive", etc., ha sido de unos 56 minutos.
El desnivel total acumulado en ascenso ha sido de unos 456 metros y de 465 metros en descenso.
La longitud total de la travesía ha sido de unos 13,5 kms.
La travesía no tiene mayor dificultad.
Es muy cómoda hasta Kukuarri y desde aquí y hasta llegar a la ermita de San Juan, la pendiente es un poco pronunciada y requiere prestar atención para evitar resbalones.
La pendiente pronunciada no es en todos los casos, son los primeros doscientos metros desde el segundo desvío a la derecha, posteriormente unos pocos metros después de saltar el murete de piedras y la última parte antes de llegar a la ermita.
El resto de la bajada es bastante cómoda.
No hay marcas y si las hay pertenecen a otros recorridos, por lo que nuestra recomendación es utilizar GPS con un buen "track".
Existen muchos cruces y desvíos y no están marcados en absoluto.
Para llegar a la estación de Usurbil hemos utilizado el tren de Euskotren de las 7,50 h. con la problemática comentada al inicio.
Para volver de Orio hemos vuelto a utilizar el tren de las 15,45 horas que nos ha devuelto, sin incidencias, al punto de inicio.
