(20240717) Circular Monasterio Irantzu-Azantzako haitza-Etxabarri-Alto de los Picos-Larraitza-Río Irantzu-Monasterio.

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Lugar de inicio.

Dejando la carretera a la derecha seguimos saltando la alambrada y por sendero estrecho rodeado de boj.

Enlace pista.

Paso canadiense y puerta metálica.

Desvío izquierda.

Desvío derecha.

Enlace pista.

Otro desvío izquierda.

Otro desvío izquierda.

Llegando a Azantzako haitza.

Disfrutando de los bosques de encinas y hayas.

Etxabarri.

Alguien  está equivocado.     ¿El autor?    ¿El mapa?     Peñas de Azantza es la totalidad del cresterío.

Desvío izquierda.

Llegando al Alto de los Picos.

Avanzamos disfrutando de una panorámica magnífica.

Sierra de Lokiz.

Mirador.

Desde Larraitza.

Collado de Mandabide.

Otro desvío a la izquierda.

Por sendero estrecho entre boj.

Desvío a la derecha.

Obstáculos.

Enlace con pista tierra.

Llegamos al Cañón de Iranzu y río del mismo nombre.

Hornacina de San Buitrago.

Fuente.

Llegando al punto de inicio.

Hoy teníamos previsto un día bastante caluroso y por tanto, hemos elegido un recorrido que tuviésemos bastante sombra, además de unas vistas muy bonitas y unos bosques dignos de mención.

Hemos comenzado a andar desde el mismo Monasterio de Irantzu. 

Una vez aparcamos el vehículo, prácticamente en el monasterio, nos preparamos y comenzamos a andar saliendo a la carretera y recorriendo unos pocos metros en el sentido por donde hemos llegado.

A nuestra derecha vemos un pequeño sendero que tiene un paso de alambrada y que continúa subiendo entre el bosque y rodeados de boj.

Avanzamos por el estrecho sendero hasta que enlazamos con una pista por la que continuamos ascendiendo,  para pasar por un paso canadiense al lado de una puerta metálica y a su lado unos postes indicadores sobre la PR-NA-181 "Peñas de Azanza" y otros senderos propios de la zona de Irantzu.

Seguimos adelante y pronto giramos en dirección Sur para dirigirnos hacia Azantzako haitza en donde nos detenemos un poco para disfrutar de las vistas.

Seguimos avanzando por el cresterío y llegamos a la cima de Etxabarri, después al Alto de los Picos, mientras seguimos disfrutando de las vistas sobre la Sierra de Lokiz.

Una vez realizadas las fotos de rigor en Etxabarri nos detenemos unos minutos para comer algo de fruta, galletas, etc., pero sobre todo para beber unos buenos tragos de agua.

Hasta ahora el calor se ha portado, tenemos el cielo cubierto y además circula un viento que resulta bastante refrescante.

Pocos minutos después seguimos adelante y llegamos a la cima de Larraitza, después de pasar por varias zonas con unas vistas magníficas.

Desde Larraitza y ahora en dirección Norte,  nos dirigimos hacia el collado Mandabide en donde nos desviamos a la izquierda y por senderos no muy bien definidos, intentando llegar al cañón y al río Irantzu.

Poco a poco y no sin dificultades, conseguimos llegar hasta la pista principal que desciende al lado del río Irantzu y nos devuelve directamente al punto de inicio.

Este último tramo final si se hace bastante agobiante ya que el sol está en todo su esplendor y la temperatura dentro del cañón es bastante elevada.

Entre el agua del río y la proximidad de una fuente, llegamos al monasterio en donde nos volvemos a refrescar en otra fuente y nos ponemos más cómodos.

Una vez preparadas optamos por preguntar en el bar del monasterio si nos dan de comer, pero no, solo tienen bocadillos y poca voluntad.

Nos ponemos en marcha para llegar a la Benta de Lizarraga, que la hemos visto abierta, para intentar comer.

Después de unos minutos de espera conseguimos preguntar al responsable si nos darían de comer y su respuesta es:

"Tenemos bastante gente hoy y no sé si podremos dar a todos, tendréis que esperar a ver qué nos queda para poder deciros algo".

¡Y el tío se queda tan tranquilo!

Volvemos al coche para llegar a Lizarraga (pueblo) y al "jatetxe" habitual.

Para nuestra desgracia, está cerrado.       Posiblemente por vacaciones o a saber.

Cada vez se nos hace más tarde y se nos agotan las opciones de poder comer "comme il faut".

Nos acordamos del "jatetxe" Borda que está a las afueras de Etxarri-Aranatz.

Según los datos del propio "jatetxe" cierran dentro de media hora, por lo que nos damos la mayor prisa posible.

Llegamos y vemos gran cantidad de coches en el aparcamiento y bastante gente que sigue entrando al "jatetxe".

!No es buena señal¡

Delante nuestro entra una cuadrilla con niños, etc., que son como unos 18.     Además, dentro hay más gente esperando y el comedor está totalmente lleno.

Nos dicen que nos apuntemos en una lista y como somos tres, posiblemente nos puedan atender en pocos minutos.

Bueno, como no tenemos otra opción, esperamos y nos arriesgamos a esperar.       

Siempre tendremos tiempo de hacernos un puré de piedras en el aparcamiento.

Al final y después de una media hora nos asignan una mesa y el servicio es muy rápido, amable y con una atención inmejorable.

La única "pega", por decir algo, es que no hemos podido tomar nuestro habitual "aperitive".

Después de elegir nuestros platos, nos sirven lo siguiente:

-Ensaladilla rusa

-Ensalada mixta

-Fideua de calamar con ali-oli

Como segundos tenemos lo siguiente:

-Costilla de ternera a la parrilla y con patatas fritas.

-Fileta de ternera a la plancha y con patatas fritas.

Los postres han consistido en cuajadas y dos bolas de helado de vainilla.

Todo lo anterior regado con un tinto joven con denominación de origen Navarra que estaba muy bien, por lo que no ha habido mucha necesidad de utilizar "gure gaxeosie".

Después de los cafés y la agradable sobremesa, nos ponemos en marcha (bajo un sol castigador) para dirigirnos hacia nuestros respectivos domicilios.

Una vez más hemos disfrutado de una bonita jornada montañera y con una gran compañía.

Hemos comenzado a andar sobre las 8 horas y 38 minutos y acabado en el mismo sitio sobre las 13 horas y 47 minutos.
El tiempo efectivo empleado en el recorrido ha sido de unas 4 horas y 13 minutos, a una media de 3 kms./hora.
El tiempo dedicado a descansos, agua, fotos, "hamaiketako", etc., ha sido de unos 56 minutos.

El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 500 metros.

La longitud total del recorrido ha sido de unos 12,5 kms.

El recorrido no tiene mayor dificultad técnica, aunque no lo vemos apto para niños ya que discurre entre zonas con bastante zarza y boj bajo,  que dificulta mucho el avance.

Salvo en zonas muy contadas, la ruta no está nada señalizada y en muchas ocasiones no existe sendero evidente y es necesario guiarse por el GPS sin perder la dirección.

Es relativamente fácil confundirse. 

Existen muchos desvíos y la mayoría no están señalizados.

Recomendamos encarecidamente la utilización de GPS con un buen "track".

Para llegar al punto de inicio hemos utilizado la N-I hasta Andoain, después la A-15 y llegar hasta Altsasu para después subir al Alto de Urbasa pasando por Lizarraga, recorrer la zona de Urbasa y comenzar a descender hasta Abárzuza,  en donde tomamos la carretera NA-7135 que nos lleva directamente al monasterio.