(20221019) Circular rodeando Adarramendi más Onddo, por la PR-GI-203.

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Lugar de inicio.    Besabi.

Subida hacia el caserío Montefrío.

Primera fuente.

Hayedo.

Belabietako erreka.

Postes indicadores.

Las famosas "betizu" pastando a su aire.

Seguimos por la ladera de Adarra siguiendo las marcas de PR.

Agirreazpiko iturria.

Hacia la zona herbosa de Eteneta.

Realizando el conjuro en Eteneta I.

Adarra.

Túmulo Eteneta III.

Cromlechs Eteneta II.

Onddo.

Panorama sobre el macizo de Hernio.

Adarra.

Intentando darle de comer con vistas al futuro.

Bajada desde Onddo.

Dolmen Otsolepo.

Más vistas sobre Adarra.

Desvío a izquierda por sendero estrecho.

Enlazamos con la amplia pista.

Desvío a la derecha en zona con postes indicadores.

Seguimos adelante por la pista.

Desvío a derecha abandonando PR.

Llegando al Col Zulueta.

Desvío a la izquierda en el collado Zulueta.

Borda.

Unos burros bajo palio.

Estábamos pensando cuando realizar este recorrido y que a la vez nos coincidiera con las jornadas que anuncian en el "jatetxe" Besabi para poder probar carne de "Betizu".

Betizu es una raza bovina que vive semisalvaje y es de color rojizo, autóctona de esta zona, de la zona de Iparralde y también de la zona Norte de Navarra.

Las betizu son animales míticos de los antiguos vascones, bajo el nombre de "zezengorri" (toro rojo).

Al final,  hoy han confluido todos los astros de manera perpendicular y después de realizar la reserva para comer, hemos decidido dar esta bonita vuelta que ha sido trifásica, es decir: 

Deportiva, cultural y gastronómica.

Hemos comenzado a andar desde el pequeño aparcamiento de la zona de Besabi y al principio por fuerte pendiente cementada hasta llegar al caserío Montefrío.

Desde aquí tomamos el camino tradicional de subida a Adarra y pasamos por un par de fuentes siguiendo las marcas blancas y amarillas de la PR-GI-203 "Rodeando Adarramendi".

Cruzamos la "erreka" Belabieta y poco después llegamos a unos postes indicadores, pero nosotros continuamos por la ladera siguiendo las marcas de PR.

Bordeamos el monte Adarra y salimos hacia una bonita explanada herbosa en la que nos encontramos varios yacimientos megalíticos con el nombre de Eteneta, dos cromlechs y un túmulo.

Desde aquí y abandonando la PR nos dirigimos hacia la cima de Onddo a través de una bonita pendiente que tiene un bosque a nuestra derecha.

Unas cuantas gotas de sudor más tarde llegamos a la cima con su buzón montañero y también con un hermoso vértice geodésico.

Después de unas cuantas fotos desde la cima, dar un poco de azúcar a unos caballos y disfrutar de las vistas, iniciamos el descenso por el lado contrario, en fuerte pendiente, hacia el dolmen de Otsolepo y un poco más adelante nos desviamos a la izquierda por un estrecho sendero para bajar a enlazar con una amplia pista forestal.

Continuamos adelante por la pista disfrutando del entorno y la comodidad de la pista y unos 70 minutos más tarde llegamos a unos postes indicadores que vuelven a indicar la dirección de la PR-GI-203.

Continuamos avanzando por la pista y 30 minutos más tarde llegamos a otro cruce en donde abandonamos la PR para tomar la SL-GI-43.

Unos 10 minutos más tarde llegamos al collado de Zulueta en donde giramos a la izquierda para seguir por amplia pista y llegar al punto de inicio.


Una vez en el aparcamiento intentamos ponernos más cómodos quitándonos las botas y refrescarnos un poco, antes de entrar en el "jatetxe".

Una vez en la barra y mientras pedimos el consabido "aperitive" nos indican la mesa que teníamos reservada y nos dirigimos a la misma.

Unos cuantos comentarios sobre las "betizu", etc. y comienza la degustación con un buen estofado de carne de "betizu".

El guiso estaba muy rico, bien preparado, la carne jugosa, tierna y con mucho sabor.

Después de dar buena cuenta al entrante nos presentan una gran fuente con solomillos preparados en su punto junto con algunos pimientos del piquillo y patatas fritas.

El solomillo tierno, en su punto de cocción y con mucho sabor.

Tampoco sobró absolutamente nada y eso que pudimos repetir.

Como postre nos ofrecieron un trozo de tarta de Adarraga con un corte de helado de vainilla.       El conjunto estaba delicioso.

Todo lo anterior perfectamente regado con un tinto joven con denominación origen Rioja y de la zona de Laguardia, con el único inconveniente (desde mi humilde opinión) que era de maceración carbónica.       Por lo demás, todo perfecto.

Los consabidos cafés, algún que otro "digestive", agradable sobremesa y pocos minutos después nos ponemos en marcha para volver a nuestros respectivos domicilios, después de haber pasado una jornada de monte magnífica, con una compañía inmejorable y con un fin de fiesta sensacional.

Hemos comenzado a andar sobre las 8 horas y 7 minutos y acabado en el mismo sitio sobre las 13 horas y 5 minutos.
El tiempo efectivo empleado en el recorrido ha sido de unas 4 horas a una media de 3 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos, agua, "hamaiketako", etc., ha sido de unos 58 minutos.

El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 500 metros.

La longitud total del recorrido ha sido de unos 12 kms.

El recorrido no tiene mayor dificultad y es muy bonito y agradecido. Al principio nos podemos encontrar con algunas rocas en el camino pero que no ocasionan ningún problema. 

La bajada desde Onddo hasta la pista es bastante pendiente y conviene tomar precauciones, pero tampoco tiene excesivos problemas.

Para llegar a Besabi nos hemos dirigido hacia Urnieta y después por la carretera GI-131 dirección Andoain hasta llegar casi al km. 3 en donde hemos girado a la izquierda tomando la carretera GI-3721 y después la GI-4721 que nos deja directamente en el aparcamiento de Besabi.