





Por lo menos hemos disfrutado de las vistas aunque no mucho tiempo.
También teníamos pendiente intentar averiguar cual podía ser el mejor camino para subir hacia la cima de Arkaitz y después de mirar por las alrededores hemos encontrado unas marcas que nos han subido por una zona bastante decente hacia cerca de Arrikoaitza, pero esto nos obligaba a retroceder para ir a Arkaitz. Tampoco nos ha convencido, por lo que deberemos intentarlo de nuevo ya que pensamos debe haber un sendero más a la derecha que suba a Arkaitz por su ladera occidental.
¡La cuarta será la vencida!
Estuvimos disfrutando de la subida con un tiempo bueno y un cielo precioso. Ya en la parte alta comenzamos a darnos cuenta que el viento soplaba muy fuerte pero tampoco sabíamos como iba a estar en la parte cimera, por lo que continuamos subiendo con intención de hacer todas las cimas previstas.
Al llegar a Errikoaitza y tener que volver atrás para subir a Arkaitz, nos dimos cuenta que el viento era muy fuerte y que no merecía la pena seguir por el cresterío, ya que la sensación térmica debido al viento era muy baja.
Decidimos seguir un poco más y subimos a Arriurdin para desde allí bajar al collado de Biozkornia o también llamado Katabera, donde se encuentran unos carteles indicadores y una balsa para el ganado.
Desde allí y siguiendo la GR en dirección Zegama, comenzamos a bajar hasta llegar a la zona del famoso camino de "tubobide" que lo seguimos hasta cruzarnos otra vez con la PR-GI-66 que la seguimos hasta llegar nuevamente al embalse.
Una vez en el embalse y comprobando que no era demasiado tarde decidimos trasladarnos a Mirandaola, con intención de comer un menú en la zona.
Nos dieron bastante bien, platos con nombres largos y que además estaban bien preparados y bien presentados. Nuestro menú consistió en:
-Ensalada templada de sapo y langostinos y por otra parte ensalada fría de pasta, pulpo, anchoas y mozzarela.
-De segundo guiso de rabo de vaca con pocas patatas tipo panadera.
Postres normales y todo ello con un vino joven DO Rioja, que estaba bastante bien aunque muy frío.
Los consabidos cafés y una sola ración de agua bendita.
Bien comidos, nos pusimos en marcha en dirección a nuestros puntos de origen.
Hemos comenzado a andar en el embalse de Barrendiola sobre las 8,30 horas y terminado en el mismo sitio sobre las 14,30 horas.
El tiempo efectivo utilizado en la excursión ha sido de 4 horas y 35 minutos, a una media de 3,5 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos, setas, "hamaiketako", etc., ha sido de 1 hora y 25 minutos. El desnivel total acumulado, tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 900 metros.
La longitud total del recorrido ha sido de unos 16,5 kms.