Foto de familia.

Foto de familia.
Ascensión a La Aguja Letour. Alpes franceses.

miércoles, 16 de marzo de 2016

(20160316) Circular Oto Goien-Olazar-Cruz Ganalto-Ermita Santa Marina-Cueva Goros-Oto Goien.

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Iglesia de la Natividad en Oto Goien/Hueto Arriba.
Vista parcial del pueblo.
Ábside de la iglesia.
Comenzamos por pista amplia.
A los pocos minutos nos vemos obligados a sacar ropa de agua.
Cruzamos una de las puertas metálicas en el camino.
Unos la abren y otros la cruzan por el extremo.
Continuamos subiendo con algo de lluvia.
Aunque no es mucha, la lluvia sigue.
Deja de llover pero a medida que subimos tenemos más niebla.
Al fondo vemos el valle.
Un mojón delimitador de municipios.
Panorama de arbustos y niebla.
Más niebla por el barranco.
Llegamos a una zona herbosa y alta pero seguimos sin ver nada.
Encina solitaria.
Al fondo parece que se ve un vértice geodésico.
Vértice geodésico de Olazar.
Foto de familia en Olazar.
Encinas en la niebla.
!!!Las vistas espectaculares¡¡¡
Llegamos al buzón de Olazar.       Lo pudimos localizar al tacto.
Otra vista del buzón.
Otro mojón piramidal y grande.
Indica el término municipal de Vitoria-Gasteiz.
Continuamos avanzando por la parte cimera pero hemos tenido que activar el "sonar".
Dicen que desde aquí se contemplan unas vistas preciosas.
Otro mojón de los piramidales.
La primera vez que encontramos una señal de tráfico prohibiendo la circulación, a casi 1.000 m. de altura y en el cresterío entre Olazar y Ganalto.
!Esto es nuevo¡       !Sólo nos falta encontrar otra de prohibido aparcar¡
Después de ésto, el encontrarnos con parquímetros es cuestión de días.
Otro mojón.     Esta vez estrecho y alto.
Vemos la Cruz de Ganalto.
La cruz entre niebla.
Por un momento las nubes nos dejan ver el pueblo de Aperregi
Una estela conmemorativa.
La Cruz de Ganalto y el vértice geodésico.
Vértice geodésico en Ganalto.
No estábamos solos.     A éstos no les importa la niebla.       
!!Con ver la hierba, se conforman¡¡.
Bonito buzón montado en la misma cruz.
Otra vista de la cruz.
El buzón de Ganalto.
Foto de familia en Ganalto.
Después de bajar lo más rápido posible por el frío y el viento, nos paramos al abrigo de unas encinas para poder comer algo.
Lugar elegido para el "hamaiketako".
Contemplando una roca curiosa.
Seguimos por pista con algo de barro.
Ermita de Santa Marina.
Pequeño abrigo en un extremo de la ermita.
Lateral de entrada a la ermita.
Interior de la ermita de Santa Marina.
Un poco más adelante nos encontramos con una pequeña balsa.
Algo de flora del lugar.
Bonita y amplia pista con encinas a los lados.
Más encinas.
Y algunas más.
Panorama con nubes.
Estas otras nubes son más amenazantes.
Una de las entradas a la Cueva de Goros.
Parte de la entrada.
Otra vista de la entrada principal.
Pared general de la entrada.
Sala de entrada.
Nos adentramos con frontales.
Las diferentes bocas.
Otro aspecto de la situación de la cueva.
Desgraciadamente los "graffitis" llegan a todas partes.
La boca de entrada vista desde dentro.
Seguimos avanzando y nos vemos obligados a agacharnos.
Nos agachamos un poco más.
Al rato nos permite ponernos de pié.
Son paredes curiosas.
Dejamos los bastones y continuamos hacia el fondo.
El fondo se estrecha.
Viendo que para continuar había que reptar, nos damos la vuelta.
Volviendo del fondo.
Indicador de la cueva y también del aparcamiento de burros.       !Sí, de burros¡
Parece ser que en temporada suben desde el pueblo con burros.
Atravesamos el cauce seco de la "erreka" Goros.
Nos encontramos con unos postes indicadores de la GR-25 (Vuelta por la llanada alavesa).
Atravesamos otra puerta metálica.
Entramos en Oto Goien y nos encontramos con una fuente, que aprovechamos.
Vista de la iglesia de la Natividad.
Pórtico de la iglesia.
Columnas del pórtico.


Una vez más e intentando huir del mal tiempo,  hemos decidido dar una vuelta por las proximidades de la Sierra de Badaia.               Hemos elegido este recorrido para tener la oportunidad de adentrarnos un poco en la Cueva de Goros. 
Hemos comenzado a andar en Oto Goien/Hueto Arriba, pasando al lado de una bonita iglesia dedicada a la Natividad, de estilo románico tardío del siglo XIII. 

Oficialmente Hueto Arriba/Oto Goien, es un pueblo y concejo perteneciente al municipio de Vitoria-Gasteiz.      Fue tierra de los Señores de Martioda, de la Casa de los Hurtado de Mendoza, y formó con la vecina localidad de Hueto Abajo, la hermandad de Los Huetos, que en el Siglo XIX quedaría constituida en municipio.      En 1.975 el municipio de Los Huetos quedó anexionado al de Vitoria.
La iglesia parroquial dedicada a la Natividad fue construida originalmente en el siglo XIII y posee la portada y el ábside de estilo románico.       En su interior destaca la pila bautismal y el retablo, ambos de estilo barroco.        También es curiosa su espadaña de tres huecos.

Salimos del pueblo en dirección Oeste y rápidamente tomamos una pista dirección Norte. 
El camino, poco a poco, comienza a ascender.        Seguimos la misma dirección y vamos viendo a nuestro lado mojones delimitadores. 
El tiempo no es muy bueno que digamos y de vez en cuando llueve, luego tenemos rachas de viento, luego vuelve a llover, etc. 
Con bastante niebla y por tanto poca visibilidad, llegamos a la zona del vértice geodésico de Olazar.       Continuamos por la cresta pero esta vez dirección Oeste y llegamos a otra pequeña cima en la que está el buzón de Olazar, alguna que otra estela funeraria y varios mojones de gran tamaño indicando el término municipal de Vitoria-Gasteiz. 
Continuamos por la cresta dirección Oeste y apenas podemos ver nada.         Es difícil ver algo a más distancia que cinco metros.       Es una pena porque debe ser una zona muy bonita ya que por la parte de la derecha es un barranco desde el que podríamos ver los pueblos de Domaikia, Aperregi y Lukiano, la Peña de Oro, etc.       Lástima que no podamos ver más allá que nuestras propias narices. 
Continuamos por un terreno cómodo y herboso y un poco más tarde llegamos a la zona de la Cruz de Ganalto.              Unas cuentas fotos rápidas y giramos 90º dirección sur con intención de protegernos del viento.        En la zona de la cruz, tampoco hemos podido ver nada. 
Continuamos bajando y a los pocos minutos y protegidos por unas pequeñas encinas, aprovechamos para hacer una parada y comer algo de fruta y también galletas y frutos secos.          También bebemos algo de agua, pero no está muy apetecible. 
Después de unos pocos minutos continuamos bajando hasta llegar a la zona de la ermita de Santa Marina. 
Unas cuantas fotos de la ermita (cerrada, por cierto) y continuamos hasta llegar a la zona de la cueva de Los Goros. 

La cueva de Los Goros, también conocida como la cueva de Las 5 bocas, debido a que cuenta con cinco bocas a dos niveles de altura.       La cavidad tiene unos dos kilómetros de recorrido, aunque solo los primeros 250 metros se pueden recorrer sin equipo de espeleología.
Normalmente y en época de fuertes lluvias,  cascadas de agua brotan de sus bocas.     Estas aguas constituyen el nacedero del río Laña, un pequeño afluente del Zadorra.

Llegamos hasta la entrada principal y después de dejar las mochilas en la boca y coger las frontales, nos adentramos en la misma con intención de ver lo que nos ofrece.       Es amplia y muy bonita, a los pocos metros de la entrada nos obliga a agacharnos un poco si queremos continuar. 
Las zonas interiores son muy bonitas, aunque no hemos visto ni estalacticas ni estalagmitas espectaculares.              Merece la pena dar una vuelta en su interior.              Por supuesto que con buena luz y con bastante cuidado. 
Salimos de la cueva y retomamos el camino por el que continuamos bajando paralelos a la "erreka" Goro,  hasta que llegamos al punto de inicio. 
Llegamos a nuestros vehículos y después de cambiarnos un poco y quitarnos algo de barro, nos dirigimos al "jatetxe" que teníamos al lado, justo donde habíamos aparcado los vehículos.
Es un lugar muy bonito, es un antiguo caserío restaurado y decorado con gusto.       También cuentan con una gran terraza que en caso de buen tiempo tiene que ser una gozada.
Después de tomar un pequeño aperitivo en la barra nos sentamos en una gran mesa y nos disponemos a comer aquello que nos preparen.
No teníamos gran variedad pero lo que hemos comido estaba bueno, de verdad.
Comenzamos por unos "Atadillos de langostino y algo más, en salsa de no me acuerdo".       Otros tomaron una crema de coliflor con más cosas.             Todo muy rico.
Como segundos nos pusieron "Confit de pato con patatas fritas hechas en casa y con salsa de otra cosa que tampoco me acuerdo".
Postres caseros deliciosos, cafés y un poco de "digestive".
La comida estuvo perfectamente regada con un tinto joven de Rioja alavesa que era muy digno.
También tuvimos acompañamiento de agua mineral y de un poco de "gure gaxeosie".        Afortunadamente sobró bastante del contenido de las anteriores botellas.
Después de unos minutos de sobremesa, nos pusimos en marcha para volver a nuestros respectivos domicilios.

Es un recorrido que no tiene mayor dificultad.         La mayoría de los caminos son grandes senderos o pistas forestales.                
No existen muchas indicaciones, salvo algunos "kairns" de vez en cuando, por lo que se hace muy necesario la utilización de GPS con un buen "track". 

Hemos comenzado a andar en Oto Goien/Hueto Arriba sobre las 8 horas y 30 minutos y terminado en el mismo sitio sobre las 13 horas y 15 minutos.
El tiempo efectivo utilizado en el recorrido ha sido de unas 3 horas y 45 minutos a una media de 3,7 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos, agua, "hamaiketako", vista cueva, etc., ha sido de unos 58 minutos. 
El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 561 metros.
La longitud total del recorrido ha sido de unos 13,9 kms.

Hemos llegado a Oto Goien utilizando vehículo propio y a través de la A-1 hasta una zona cercana al aeropuerto de Foronda, para salir de la autovía y tomar la A-3302 hasta un cruce y poco después la A-4310 que nos lleva hasta el mismo pueblo.

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