Foto de familia.

Foto de familia.
Ascensión a La Aguja Letour. Alpes franceses.

miércoles, 7 de agosto de 2013

(20130807) Circular Arrarats-Ireber-Launtze-Begaine-Arrarats.

Para descarga y detalles del track haga clic en el icono de inicio.
El pueblo de Arrarats.
Comenzamos el recorrido.
Subimos por pista cementada.
Punto de giro.
Giramos 90 grados.
Sendero en el bosque.
Entre hayas y helechos.
Hayas y alguna que otra "gibelurdiña".
Ascendemos por el bosque.
Bonito bosque.
Dolmen sin nombre.
Depósito y conducción de agua.
Continuamos subiendo por zonas dignas de verse.
Llegamos a un cruce con un sendero herboso.
Cima de Ernaitzu con bastante niebla.
Buzón de Ernaitzu.
Otra vista del curioso buzón.
En el suelo el martillo de Thor.
Foto de familia en Ernaitzu.
Como si fuese Excalibur.
Ha llegado Thor.
¿Yacimientos megalíticos?
Parece que sí.
Hay varios juntos en la cima.
Bajando al collado.
Una especie de refugio.
Zona de encuentro con la GR-12.
Llegando a Ireber.
Magníficas vistas.
Buzón de Ireber.
Vistas hacia el oeste.
En la cima de Ireber.
El otro buzón de Ireber.
Foto de familia en Ireber.
Indicación del dolmen.
Dolmen de Bi Aizpen Sepulture.
Gorilas en la niebla a la hora del "hamaiketako".
Tan perdidos como un pulpo en un garaje.
Aska y fuente.
Lugar de nuestros descubrimientos.
De aquí también nos llevamos algo.
Entramos en zona privada del consejo.
Están tranquilos, a su aire.
En plena asamblea.
Este estaba con el postre.
Depósito de agua y fuente.
Letreros indicadores.
Buscando, buscando.
Buzón de Begaine.
Foto de familia en Begaine.
"Falus impudicus", como siempre lleno de moscas.
¿Será diabético?
En el bosque.
No había buzón, por lo que improvisamos.   En la cima de Ozpegaina.
Foto de familia en Ozpegaina.
Más letreros indicadores.    En este punto tomamos dirección Arrarats.
Bajando al pueblo por pista cementada.
Entrando en Arrarats.
Iglesia de Arrarats.

Ya nos costó decidirnos por este recorrido.     Varios días dando vueltas sobre si hacer una vuelta desde Leitza por Aritz, Superrori, Ireber, etc., pensando en el pronóstico del tiempo, de pronto aparecía una alternativa por Lesaka y Arritxulo, luego otra por Endarlasa, en fin, al final pensamos en éste,  pero incluso el mismo día no lo teníamos nada claro, ya que también podíamos haber hecho la de Leitza.      En el mismo coche decidimos dirigirnos hacia Arrarats, ya que el aspecto del cielo y el "sirimiri" que caía, nos empujaron a pensar en el recorrido más corto por si las lluvias.
Por la A-15 y saliendo en la salida de Goldaratz, nos dirigimos hacia Basaburua y después de pasar por Jauntsaras nos desviamos en dirección a Arrarats.
El pueblo parecía desierto y tanto a la ida como a la vuelta no vimos a nadie,  únicamente un perro que no paró de ladrar, hasta que nos fuimos.
Después de decidir por qué zona iniciábamos el recorrido (teníamos dos distintos y cada uno comenzaba por el lado opuesto al otro), comenzamos a andar con el compromiso que comenzábamos por un "track", pero acabábamos por el otro.      Así lo hicimos y nos resultó ameno y muy agradable.
Empezamos a salir del pueblo descendiendo hacia una pequeña "erreka" para poco después comenzar a subir por una pista cementada y con buena pendiente.
En un punto determinado tuvimos que dejar la pista y desviarnos en un giro de unos 90 grados para adentrarnos en un sendero un poco cerrado por los helechos hasta que entramos en un bonito bosque de hayas.     Haciendo zig-zag por la ladera llegamos hacia un dolmen que no tenía nombre y posteriormente tomamos un sendero abierto entre los helechos y muy herboso.      Este sendero se adentró en el bosque y poco a poco y haciendo lazos por la ladera del monte llegamos a la cima de Ernaitzu.         Me encantan estos recorridos en los que cuando has llegado a una cima, la vista más bonita es el "careto" del amigo que está a tu lado.        !Vaya niebla¡          !No se apreciaba nada más allá de cinco metros¡
Nos sacamos unas fotos y estuvimos un rato contemplando el buzón que estaba inspirado en los encierros de San Fermín.       Comenzamos a bajar hacia un pequeño collado donde nos cruzamos con la GR-12 para posteriormente seguir subiendo hasta llegar a la cima de Ireber.           En esta cima lo mismo que en la anterior, veíamos las rocas de la punta, los buzones y poco más.         En un momento parecía que la niebla se disipaba pero fue una falsa alarma, las nubes se volvieron a agarrar a la cima.   
Vistas magníficas hacia el Este y Oeste.            Dicen que con tiempo despejado se pueden ver parte de Los Dolomitas.          El problema es que no hemos encontrado a nadie vivo que nos dé testimonio del paisaje que se aprecia desde Ireber.
Desde allí bajamos (como pudimos) hacia la zona del dolmen de Bi Aizpen Sepulture donde aprovechamos el lugar para tomar algo y beber un poco de agua.       La zona era bonita pero debido a la niebla, podía ser cualquier otra.         Subimos a Launtze y después giramos en dirección Este y acompañados por la GR-12, hasta llegar a un "aska" que también era fuente y un poco más adelante unos postes indicadores de caminos.
Desde allí comenzamos a subir a la cima de Begaine, que nos hizo soltar unas cuantas gotas de sudor, para después de contemplar el buzón de la cima y de otras cuantas fotos, continuamos en dirección Noroeste hacia la cima de Ozpegaina.     Esta cima no tenía buzón, por lo que con unas cuantas piedras y unos cuantos bastones, simulamos la cima en la parte más alta.          Desde allí retomamos nuevamente la GR-12 hasta que en una zona de cruces y postes indicadores abandonamos la GR y tomamos un amplio sendero en dirección Arrarats.      Por una especie de pista que a veces se convertía en sendero pero que en cualquier caso era muy cómodo, llegamos a Arrarats.        Teníamos el coche estacionado al lado del frontón y de la iglesia y tampoco vimos a nadie, ni siquiera estaba el perro para que nos ladrase.       Teníamos interés en encontrarnos con alguna persona para poder preguntarle por algún bar o sitio donde pudiésemos comer, pero no hubo manera.          Nos refrescamos un poco y nos pusimos en marcha en dirección a la Benta Udabe, que habíamos visto a la ida.        No nos hizo falta, al llegar a Jauntsaras vimos que había un bar que ponía "Eguneko menua" en un cartel en la calle.          Aparcamos el coche y preguntamos por si era hora adecuada.       Nos contestaron que sí y nos sentamos prestos en una mesa con apetito y con intención de devorar todo lo que nos pusiesen.          El bar era un establecimiento mixto:   Bar, restaurante, tienda, artículos de artesanía, recuerdos, etc.      Se llama Apeztegiberri.          Muy agradable y nos atendieron de maravilla.      Nos presentaron unas pequeñas cartas del menú del día de la que elegimos unas verduras laminadas hechas a la plancha y posteriormente horneadas con un poco de queso y también un arroz caldoso de pescado.       Las dos cosas estaban muy bien y abundantes.      Como segundo plato los tres elegimos un guiso de carrilleras de cerdo.       Era una ración abundante y muy bien hecha.     
Para terminar unas cuajadas de leche de oveja (muy buenas) y el tercero un helado especie "cornete".
Después de los cafés de rigor y de un poco de agua bendita, nos despedimos del establecimiento muy satisfechos por la relación calidad-cantidad-precio (11€ menú sin café, pero con vino y agua).        Por cierto que estuvimos comiendo con un tinto ecológico, que también tenían a la venta.      En el tema del vino hubo división de opiniones.            Incluso aquél que nunca mezcla el vino con gaseosa ("Gure gaseoxie"), no tuvo más remedio que mezclar en un par de ocasiones.             En vista del comentario anterior evito hacer una crítica más sofisticada.
Durante la sobremesa escuchamos los ruidos típicos de una tormenta y después de unos pocos minutos nos pusimos en marcha en dirección a nuestros respectivos domicilios.
Ha sido un bonito recorrido en una zona boscosa de hayas en la que cada paraje era más bonito que el anterior.     Incluso hemos aprovechado la oportunidad para coger xixas, gibelurdiñas, hongos, etc.

Hemos comenzado a andar al lado de la iglesia de Arrarats sobre las 8 horas y 20 minutos y terminado en el mismo sitio sobre las 14 horas y 40 minutos.
El tiempo efectivo utilizado en el recorrido ha sido de 4 horas y 25 minutos, a una media de 3,4 kms./hora.
El tiempo efectivo empleado en descansos, fotos, "hamaiketako", recogida de xixas, giberlurdiñas y algún hongo que otro, ha sido de 1 hora y 50 minutos.
El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso ha sido de unos 955 metros.
La longitud total del recorrido ha sido de unos 16,2 kms.

1 comentario:

  1. Info sobre el dolmen sin nombre.
    Dolmen de Elkorra
    Agrandar en nueva ventana
    Dolmen de Elkorra

    Este dolmen lo vemos dentro del bosque de hayas de singular belleza, entre afloramientos de caliza y grandes dolinas, muy cerca de un viejo depósito de agua, en un pequeño collado de terreno escabroso, se encuentra bien definido pero con la cámara revuelta

    ResponderEliminar