Foto de familia.

Foto de familia.
Ascensión a La Aguja Letour. Alpes franceses.

miércoles, 5 de octubre de 2011

(20111005)Circular Lizarrusti-Lareo-Sarastarri-Agautz-Leizadi-Lizarrusti.

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Curiosa fuente en el camino al embalse de Lareo.

Curso del recién bautizado río Ferro.

Pared del embalse de Lareo.

El nivel del embalse no estaba muy alto.

Vista del embalse desde el puente.

Sendero en el bosque.

Otro sendero de la misma zona, o el mismo pero sin bichos.

Entrada a la cueva de Sarastarri.

El "hall" o recibidor.

Livinsgton, supongo.

Entrada al salón con bonitas formaciones en el techo.

La decoración sigue la misma pauta en casi todas las zonas.

Una vez en el salón, posamos un momento.

Esperando los canapés.

Pasillo hacia los dormitorios.

Uno de los invitados se dirige a sus aposentos.

Pequeña zona de recreo.

Ojo de Sarastarri.

Foto de familia en la cima de Sarastarri.

Parte de la cresta de Sarastarri.

Buzón de Sarastarri.

Con el buzón de Agautz.

El mismo buzón pero sin bicho.

Otra familiar en Agautz.

Buzón de la cima de Leizadi.

Este día resultó ser muy familiar.

Se divisa el embalse de Lareo.
Hacía allí debemos dirigirnos.

Ejemplo de canibalismo en el reino vegetal.

La entrada de otra cueva o sima.

Otra sima distinta a la anterior.

Una bonita cascada que termina en el fondo de una sima.

Llegamos otra vez al embalse.

Contemplando el nacimiento del río Ferro.

Zona de pared encadenada.

Observando. ¿Qué? Ya le preguntaremos otro día.

Pared con cadenas y puente.
¿Qué delito habrá cometido esta pared?

En Lizarrusti y ante una buena botella de txakolí.

En principio teníamos previsto realizar una excursión por la zona próxima al Puttarri pero a última hora hubo un golpe de timón y optamos por hacer esta que a priori nos podía resultar más atractiva, por la cueva, la cascada, las vistas desde Sarastarri, etc., etc.

Todo se cumplió bastante bien, salvo lo de las vistas. Se despejó cerca de las dos de la tarde, con lo que nos quedamos sin poder contemplar las bonitas vistas que debíamos tener desde esta zona.

!Otra vez será¡

El inicio del camino era muy agradable, entre bosque y por senderos muy bonitos. Pasamos por la fuente y después por el famoso río Ferro y al poco tiempo llegamos al embalse de Lareo.

Las nubes ya estaban bajas por lo que a duras penas conseguíamos ver la totalidad del embalse.

Bordeamos el mismo e iniciamos una nueva ascensión hacia la cima de Sarastarri. Un poco antes nos desviamos un poco con intención de llegar a la cueva del mismo nombre.

Aprovechamos la circunstancia para explorar un poco y hacer unos "pinitos" de espeleología.

Nos pareció bonita y amplia y curiosamente no estaba excesivamente estropeada.

Una leyenda que se conserva por la zona de Ataun sobre esta cueva, es la siguiente:

"Un grupo de carboneros que trabajaba en las proximidades de Sarastarri sacaba el agua necesaria del pozo existente en la cueva. Cierto día un joven carbonero acudió a la cueva a coger agua con su propia jarra; pero volvió a la cabaña asustado y sin agua.
Entonces, el jefe de los carboneros fue a la cueva pero también volvió asustado y sin agua en la jarra. Los dos decían lo mismo: que en la entrada de la cueva habían visto una bella y esbelta joven peinándose el cabello; era la propia Madre Tierra, venida a
Marimundu de Agaramunda, y que habían huido pensando que un espectáculo tal en lugar como ese no era buen presagio."


En el suelo se apreciaba una importante cantida de cal o yeso, lo que es debido a que como la zona es kárstica y el agua de lluvia o de deshielos es rica en ácido carbónico, al caer sobre rocas calcáreas o yeso (ricas en carbonatos de calcio), produce una acción química de disolución.
¿A que he quedado bien?

Después continuamos hacia las cimas, pero desde ninguna de las tres conseguimos ver nada, ya que las nubes las teníamos encima.

Poco a poco fuimos girando con intención de bajar hacia el otro lado del embalse. Entre bosques y piedras, por senderos nada definidos llegamos hasta la zona de la famosa cascada de Ubegi. Es muy difícil de fotografiar ya que vierte sus aguas directamente a una sima y la zona es muy peligrosa.

Desde allí continuamos camino hasta el embalse y después de unas cuantas fotos más, tomamos el camino de ida para bajar al Parketxe de Lizarrusti.

Una vez allí y después de refrescarnos un poco, pedimos una botella de txakolí para refrescar nuestro espíritu.

Después que terminaron de comer una amplia cuadrilla de niños, nos atendieron y pudimos disfrutar de una comida bastante completa.

-Ensaladas de tomate con gulas y pimientos, además de unos espaguettis que no hicieron mucha gracia al consumidor.

Después unos buenos "entrecots" para la mayoría y un txitxarro al horno para un caprichoso.

Todo ello bien regado con vino, sidra y agua.

Para postres hubo de todo, helados, queso, etc. y después cafés con un poco de agua bendita.

Un día de lujo, salvo las nubes todo resultó fenomenal y además, como siempre, pudimos resolver tres o cuatro grandes problemas de la política europea.


Hemos comenzado a andar en Lizarrusti sobre las 8,15 horas y terminado en el mismo sitio sobre las 14 horas.
El tiempo efectivo empleado en la excursión ha sido de unas 3 horas y 40 minutos, a una media de 3,6 kms./hora.
El tiempo empleado en fotos, descansos, paisaje, "hamaiketako", cueva, etc., ha sido de unas dos horas.
El desnivel total acumulado tanto en ascenso como en descenso, ha sido de unos 560 metros.
La longitud total del recorrido ha sido de unos 14,5 kms.

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