Foto de familia.

Foto de familia.
Ascensión a La Aguja Letour. Alpes franceses.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

(20090930) Circular Arano-Mandoegi-Goizueta-Arano

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Es una zona con muchos descubrimientos megalíticos. Hay indicaciones de cromlechs, túmulos, etc., por todo el cordal.
Otro más.
Haciendo unas comprobaciones en la cima de Arriurdigain.
Buzón de Arriurdigain.
Aunque el tiempo estaba un poco brumoso, al fondo se aprecia el Txindoki. ¿O no?
Cima y estela en Mandoegi.
Efectos del flash en la cima de Mandoegi.
Goizueta a la vista.
Curiosa casa según bajábamos a Goizueta.
Un rincón curioso en el camino.
Bonito sendero por el que se divisa a un depredador sin piedad.
Llegada a Arano.
El día anterior y pensando que estaba solo para hoy me había montado mi película para darme una vuelta por mi querido Txindoki, ya que hace tiempo que no volvía y lo tenía un poco abandonado cuando Juanma me manda un correo para apuntarse a la excursión de hoy. Le contesto diciéndole cual era mi plan, pero que también podíamos hacer esta vuelta por Mandoegi. Me contesta que él prefiere lo de Mandoegi y que de paso podemos volver a comer a Arano, al Ostatu y así estamos un rato con Imanol Segues. Le contesto que de acuerdo, pero que por si acaso es mejor llevar algo de comida ya que la excursión puede ser un poco larga y podemos no llegar a una hora prudencial. Todos conformes quedamos en que le recojo a las 8 horas en el lugar de costumbre y nos ponemos en marcha dirección Arano. Hace mucho tiempo que no voy por la carretera de Goizueta y por el camino intento indicarle a Juanma en qué punto se encuentra un acceso a la cola de la presa de Añarbe, que desde la carretera sube un poco y después de atravesar un túnel llega a la cola. El tema es que no encuentro el acceso, ni por la mañana a la ida ni por la tarde a la vuelta. Parece que lo hubiesen quitado. Pero también puede ser que como han pasado bastantes años, he perdido las neuronas donde guardaba la información de acceso a la presa.
Bien, de cualquier forma llegamos a Arano y aparcamos en la parte alta del pueblo.
Por cierto, que está lleno de zonas de aparcamiento. !Qué lujo¡
Nos preparamos y a los pocos minutos nos ponemos en marcha. Serían sobre las 8,45 horas. Solo teníamos el track del recorrido y un mapa cutre. Así como el camino a Mandoegi desde Arano no presentaba muchas dificultades en cuanto al trazado, el camino de vuelta de Goizueta a Arano no lo conocíamos, por lo que era una incógnita. Nos encontramos con varios postes indicadores, que sorprendentemente indicaban la GR-121 (Vuelta a Gipuzkoa), e incluso una variante de la misma, la 121.2, por lo que parte del camino inicial, hasta tomar el cordal lo hicimos con marcas blancas y rojas. Después nos dimos cuenta que la etapa que pasa por Arano es la que sigue hacia Orexa, pero la que no teníamos controlada era la variante, que parece ser iba o pasaba por ese barrio de Arano que se llama Suro o algo así.
Bueno, seguimos nuestro camino y dejamos las marcas blanquirrojas al margen para coger el cordal que nos llevaría a Mandoegi. Esta zona del cordal es preciosa. Es una zona herbosa, suave, que nos permite ir viendo todos los montes de alrededor e incluso los mas lejanos. Aunque el día estaba con bastante bruma podíamos ver Donostia y Ulia, Aiako Harria, Txindoki y Aralar, Ernio, Larun, etc.
! Precioso ¡ !Una auténtica gozada¡
Ya por las zonas altas del cordal empezamos a tropezarnos un bastantes caballos pero sobre todo con bastantes vacas cornudas. !Y qué cuernos¡
Creo que les llaman "betizu", aunque no estoy muy seguro. Lo curioso del caso es que casi todas llevaban "txintxarri" y no paraban de vigilarnos. Hubo algún momento que otro que no tuvimos mas remedio que hacernos respetar y ponerlas en su sitio.
Esto lo hicimos a base de bastantes berridos y unos cuantos aspavientos. El problema era cuando les dábamos la espalda, ya que aunque todas tenían cencerro no estábamos muy seguros si no habría alguna que tuviese cencerro con silenciador. El caso es que no tuvimos necesidad de utilizar nuestras habilidades como bomberos-toreros. Continuamos por el cordal sin problemas y contemplando el paisaje que era precioso hasta que llegamos a Mandoegi. Por cierto, por el camino no hicimos mas que ver "galanpernas" preciosas, que las fuimos dejando porque no dejaba de ser un peñazo llevarlas todo el rato.
Al final Juanma no pudo resistirse y empezó a recogerlas. (Por eso la foto con la bolsa de plástico.) La verdad es que recogimos un montón y otro tanto que dejamos. Por el camino estuvimos comentando las diferentes formas de cocinarlas. La receta que más éxito tuvo es aquella que se hace con langosta a la plancha, es decir, fríes las "galanpernas" en una sartén con un poco de ajo, aceite y sal, después y en una plancha aparte pones las dos partes de la langosta previamente partida y sazonada. Cuando compruebes que está en su punto, la sacas a una bandeja y la sirves caliente y con una buena botella de txakolí.
!Oh, las "galanpernas"¡ !Sí¡
Cuando hayas terminado con la langosta, compruebas si las "galanpernas" están frías y en caso afirmativo las tiras a hacer puñetas porque para eso te has comido la langosta.
En caso de que todavía estén calientes, a lo mejor estás a tiempo de regalárselas al primer "pardillo" que pase por allí.
En fin, después de comer algo en la cima de Mandoegi, es decir, lo de siempre: Manzana, frutos secos, etc., esta vez tuvimos sorpresa. Juanma sacó un pequeño termo con café y además tenía azucarillos. Estaba calentito y muy bueno. !Digno de agradecer¡
A los pocos minutos nos pusimos en marcha con intención de bajar a Goizueta siguiendo el cordal, pero esta vez hacia abajo. Esta parte del cordal no era tan buena. Teníamos que pasar por alguna zona no tan cómoda, pero bueno, tampoco estaba mal. Seguimos bajando hasta que vimos el pueblo a lo lejos. Al llegar a un caserío tuvimos que saltar una "langa" de mala manera ya que no tenía forma de abrirse al estar totalmente atada con cuerdas y encima la gente del caserío nos estaba mirando porque estaban sentados en la puerta. Saltamos la "langa", haciendo un poco el ridículo, como es natural y al llegar a la puerta del caserío le preguntamos por el sendero viejo que baja al pueblo y nos enseñaron, pero curiosamente pasa por al lado de su caserío y por tanto lo tenían bastante oculto y con perros de los de tocar las "pelotas".
!Estos son los ecologistas cuidadores de caminos y senderos y los que preservan la naturaleza¡
!Tiene pelotas el tema¡ Si no llegan a estar en la puerta y no les podemos preguntar, hubiésemos tenido que bajar por la carretera dando una vuelta de más de un kilómetro.
!En fin, qué le vamos a hacer¡ Llegamos al pueblo y casualmente llegamos a una zona de una fuente y una gran mesa de cemento. En vista que ya era bastante tarde y no llegaríamos a Arano para poder comer en el Ostatu, nos sentamos allí a picar lo que habíamos traído. Una lata de sardinillas y un sobre de jamón. Tuvimos suerte porque a Juanma todavía le quedaba café en el termo. Tomamos café y también agua bendita. !Todo un detalle¡
Nos pusimos en marcha y cruzamos el pueblo con intención de llegar a Arano. Comenzamos subiendo por una pequeña carretera asfaltada que no sabemos muy bien hacia donde iba. Poco a poco íbamos cogiendo altura, ya que desde Mandoegi habíamos bajado mucho y teníamos que volver a subir. Por los senderos, caminos, atajos, vericuetos, etc. que fuimos, hubiese sido muy difícil conocer, incluso con un buen mapa, ya que no hay nada señalizado y muchas veces el sendero no era muy evidente. Intuíamos cual podía ser la dirección a tomar y que después de una loma podíamos ver el pueblo o la antena, pero no estaba nada claro. Gracias al GPS no tuvimos ningún problema y llegamos a Arano sin mayores problemas. Desde Goizueta se nos hizo muy largo el camino, ya que pensábamos que podíamos estar más cerca, pero nos costó al menos dos horas llegar a Arano. Una vez de vuelta en el pueblo, nos dirigimos al Ostatu y tomamos una cerveza con limón que entró de maravilla. Estuvimos charlando un rato con Imanol que nos dijo que cierra los lunes y los martes y que está a gusto y con bastante trabajo. Nos despedimos y volvimos al coche para coger el camino de vuelta a casa.
Como antes he indicado, estuve pendiente para ver cual era el camino que se mete en la cola del embalse de Añarbe y no lo conseguí. !En fin, otra vez será¡
El día fue muy bonito para andar y la excursión preciosa por un cordal digno de mención y totalmente lleno de yacimientos megalíticos.
La longitud total de la excursión fue de 21,8 kms.
Tiempo total en movimiento 6 horas 4 minutos a una media de 3,6 kms./hora.
El tiempo dedicado a paradas ha sido de 2 horas y 5 minutos.
El desnivel acumulado en ascenso ha sido de 1.130 metros y lo mismo en descenso.
Hemos comenzado a andar sobre las 8,45 horas y terminado sobre las 16,50 horas.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

(20090923) Travesía circular al Monte Ulia en Donostia.

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¿Es la Selva Negra?
¿Es el Amazonas?
¿Puede ser Canadá?
Pues no, es el Monte Ulia en Donostia.
Marcas no faltan.
Estamos dejando el asfalto.
La Zurriola desde el antiguo caserío Iradi.
También es Camino de Santiago.
Y seguimos con las marcas. En este cartel coincide la flecha amarilla del Camino de Santiago, la blanquiroja de la GR-121 y las dos botitas amarillas, que son las indicaciones de la ruta del litoral del Club Vasco de Camping.
Llegamos a la Punta Monpas. Su nombre viene del francés Mon Pas (Mi paso), que todavía se puede leer en las ruinas de las fortificaciones.
Senderos cuidados por el amigo Josetxo.
Otro bonito sendero.
Estos son trabajos bien hechos. ¿Eh?
!Vaya trabajo¡
Y otra.
Fuente de La Kutralla. Antiguamente el nombre estaba completo y además tenía muchas más agua que en la actualidad.
Es poquita el agua que mana.
Rocas erosionadas por el mar y el viento.
Más rocas.
Seguimos con los bonitos senderos.
¿Para cuándo lo de Parque Natural?
¿No se lo merece?
Pequeña fuente en el camino.
Cala Ilurgita.
La misma cala, por el otro lado.
Más formaciones rocosas.
Al fondo el Faro de la Plata.
Antiguo acueducto que llevaba agua hasta Donostia.
Otra vista del mismo.
El Faro de la Plata, un poco más cerca.
Una mesa al lado de la fuente principal del recorrido. Además, la mesa tiene las indicaciones pertinentes para que sirva de orientación.
Indicadores a la salida a la carretera del faro.
Al lado del acceso al faro.
Bocana del puerto de Pasajes.
El otro lado de la entrada a puerto.
Más indicadores bajando al puerto de Pasajes.
Faro de Senekozulua.
Inicio de uno de los muelles de Pasajes San Pedro.
Tasca Arzak, donde hemos tomado un pequeño "hamaiketako".
Bajando hacia Gros......., el motivo del por qué la zona se llama Ate gorri eta.
Teniendo en cuenta que la semana pasada no pudimos hacer gran cosa debido al tiempo reinante, en el día de hoy no estaba dispuesto a que el tiempo pudiese conmigo. Ya tenía claro que iba a estar solo, uno de vacaciones, otro con problemas geriátricos, otro con celebraciones matrimoniales, etc. etc.
!No importa¡
La cuestión era aprovechar que parece no iba a llover. Como tampoco tenía muchas horas libres, he decidido dar una bonita vuelta por la base de entrenamiento de varios miembros del grupo. El cielo estaba bastante nublado pero no amenazaba lluvia, por lo que he cogido una mochila pequeña con un poco de agua, una manzana y adelante.
Es un auténtica gozada comprobar como a los dos minutos de abandonar el asfalto te encuentras en un entorno de bosque, en silencio, oyendo los pájaros y alguna que otra gaviota escandalosa.
Desde fuera podría confundirse con cualquier bosque de los afamados.
Y lo bueno es que está a cinco minutos andando del centro de la ciudad.
!Es un auténtica gozada¡
Hoy tenía la idea de dar una bonita vuelta y a la vez hacer un reportaje gráfico. No sé si lo he conseguido (lo del reportaje gráfico), pero por lo menos me lo he pasado bien y ha sido un auténtico deleite pasear por la zona, contemplando los senderos, el mar, los pájaros, las fuentes, el antiguo acueducto, los faros, etc. etc.
El camino está muy marcado y además coincide con parte del Camino de Santiago, con parte del camino del litoral, marcado con unas botas amarillas, por el Club Vasco de Camping y en sí mismo está marcado con pintura roja y blanca, ya que forma parte de la GR-121 - Vuelta a Gipuzkoa.
He llegado tranquilamente a Pasajes y después de pasear por sus muelles, tomarme un café en un bar del pueblo he seguido camino hacia el Alto de Miracruz, donde he parado unos minutos en la Tasca Arzak. Como era una hora apropiada he entrado para tomarme el correspondiente "hamaiketako". !Ha sido delicioso¡. He tomado lo siguiente:
-Sardinas pichardus en costrón de aceites vegetales y algas japonesas marinadas durante 48 horas en vinagre de calabacín.
-Hojaldres rellenos con maceración de lácteos de oveja latxa ahumados durante más de 3 meses en borda de la falda de Larrunarri.
En vista de lo anterior no me llegaba para vino, por lo que he tenido que beber agua en la fuente de al lado.
Después del almuerzo y debido a que he tenido que hacer un "sinpa", he salido "cagando leches" hacia el barrio y justo me ha dado tiempo de sacar la última foto de la famosa Ate Gorri.
Longitud total de la excursión 13,230 kms.
Tiempo total en movimiento 2 horas 50 minutos a una media de 4,7 kms./h.
Ascenso total 360 m. y descenso total 377 metros.